Por su estructura química las grasas se dividen en saturadas, monoinsaturadas, poliinsaturadas y ácidos grasos TRANS.

• Grasas saturadas: se encuentran en alimentos de origen animal (carnes grasas, mantequillas, mantecas) y en el aceite de coco y palma. Este tipo de grasa aumenta el colesterol más que cualquier otro tipo de grasa. Su exceso aumenta la biosíntesis de colesterol y tiene efecto trombogénico.
• Grasas monoinsaturadas: su principal representante es el ácido oleico presente en el aceite de oliva. Pueden disminuir el colesterol total y LDL cuando sustituyen parcialmente a las saturadas.
• Grasas poliinsaturadas: se encuentran principalmente en alimentos de origen vegetal y en pescados y mariscos. Son esenciales porque no se sintetizan en el organismo, hay que aportarlos a través de la alimentación. Son componentes imprescindibles de las membranas celulares y precursores de las prostaglandinas (moléculas mediadoras en la inflamación). Estas se dividen en Omega 6 y Omega 3, esta última destaca por su acción vasodilatadora, disminuye la tensión arterial, previene la trombosis y enfermedades cardiovasculares y además disminuye el nivel de colesterol LDL y aumenta el nivel de colesterol HDL.
• Grasas TRANS: proceden de forma natural de la grasa de la leche y de la carne de rumiantes, pero mediante una transformación química como la hidrogenación. Estas grasas elevan el colesterol LDL y tienden a acumularse en diversos tejidos, como el músculo cardiaco.

ALIMENTOS QUE LAS CONTIENEN

• Grasa saturada: grasa animal (carnes, vísceras, piel de pollo, huevo, lácteos enteros, nata), aceite de coco y palma, chocolate, pastelería y bollería.
• Grasa monoinsaturada: aceite de oliva, soja y colza, aceitunas, frutos secos y aguacate.
• Grasa poliinsaturada: pescados, aceites de semillas (girasol, maíz, germen de trigo, pepita deuva, cacahuete) y frutos secos.
• Grasa TRANS: margarinas, aperitivos industriales fritos, pastelería y bollería industrial.

INGESTAS RECOMENDADAS

Los Lípidos deben aportar en personas adultas entre un 30 y un 35% del consumo energético diario. Dentro de este margen entre el 15 y el 20% deben ser  monoinsaturadas, entre el 6 y el 10% deben ser  poliinsaturadas, se debe de consumir menos de un 10% de saturadas y menos de 1% de grasas TRANS.

También es interesante reducir la ingesta de colesterol a menos de 300mg/día